APAPACHOA

Pedagogía Waldorf: ¡aprende a aprender!

Pedagogía Waldorf

El método Waldorf es uno de los sistemas educativos alternativos más conocidos. Esta metodología busca el desarrollo de cada niño en un ambiente libre y cooperativo, sin exámenes y desarrollando su lado creativo. 

El taller de Apapachoa está íntegramente dedicado a la creación de muñecos textiles inspirados en las muñecas Waldorf, las cuales combinan diferentes técnicas y son realizadas con materiales de gran calidad. Pero… ¿conoces la historia de la pedagogía Waldorf y cómo se imparte? ¡Lolo, Mara y Surya, los muñecos Waldorf de Apapachoa, te lo cuentan!

¿Cómo surge? ¿Cuál es su objetivo?

Pedagogía Waldorf

La pedagogía Waldorf fue creada por el filósofo y pedagogo austriaco Rudolf Steiner en 1919.

El objetivo de esta pedagogía es conducir un desarrollo equilibrado del intelecto. ¿Cómo? A través del desarrollo afectivo-social y del desarrollo psicomotor en cada niño y niña dentro de un ambiente libre y cooperativo. El aprendizaje en el aula es enriquecido artísticamente mediante una metodología integral, fomentando la voluntad de forma activa, orientada a dar soluciones a nuevos problemas, desarrollo de la responsabilidad personal y su autonomía

Ventajas

¿Qué métodos de pedagogía Waldorf se emplean en el aula? 

Los métodos de enseñanza relacionados con esta pedagogía están asociados con la propia búsqueda y experimentación .Por ello, ya que su base radica en la cultura de las artes, se realizan talleres en grupos cooperativos, aprendizajes de un área concreta, proyectos, etc, para inculcar la creatividad y favorecer el desarrollo de las personas a lo largo de su vida.

Pedagogía Waldorf

¿Cuáles son las etapas educativas de la pedagogía Waldorf?

Se imparte desde edades muy tempranas, concretamente desde los 0 hasta los 21 años, divididas en tres etapas: 

Se centra en el desarrollo de la psicomotricidad fina y gruesa, la habilidad viso espacial y conocimiento del entorno físico que les rodea. Para conseguir esto, las escuelas Waldorf, crean ambientes que dan cabida a la cocina y a diversos talleres.

Esta fase gira entorno a la creatividad y la imaginación. El docente debe impartir las áreas de matemáticas, idiomas o conocimiento del medio a través de juegos o invención de historias que fomenten la creatividad.

Aquí se trata de cimentar su personalidad y se motiva el espíritu crítico. En esta etapa, los educadores deben de motivar a los alumnos para que emitan juicios de valor sobre el mundo que los rodea.